Las impresoras 3D utilizan diversos consumibles, también conocidos como filamentos, para crear objetos tridimensionales. Los tipos más comunes de filamentos para impresoras 3D son:
PLA (ácido poliláctico): El PLA es un filamento biodegradable y respetuoso con el medio ambiente fabricado a partir de recursos renovables como el almidón de maíz o la caña de azúcar. Es popular por su facilidad de uso y su bajo olor.
ABS (acrilonitrilo butadieno estireno): El ABS es un polímero termoplástico duradero y resistente a los impactos. Tiene un punto de fusión más alto que el PLA y se suele utilizar para piezas funcionales.
PETG (Polietileno Tereftalato Glicolado): El PETG es un filamento fuerte y transparente con buena resistencia química. Combina la facilidad de impresión con la durabilidad de materiales como el ABS.
TPU (poliuretano termoplástico): El TPU es un filamento flexible con propiedades similares al caucho. Se suele utilizar para imprimir piezas flexibles y elásticas, como fundas de teléfono o plantillas de zapatos.
Nylon: El nailon es un filamento fuerte y duradero con buena resistencia al impacto. Es adecuado para una amplia gama de aplicaciones, como engranajes y componentes mecánicos.
Filamentos rellenos de madera/fibra de carbono/metal: Estos filamentos contienen partículas de madera, fibra de carbono o metal, que añaden propiedades únicas a los objetos impresos, como un acabado similar a la madera o una mayor resistencia.
HIPS (poliestireno de alto impacto): El HIPS se utiliza a menudo como material de soporte para imprimir estructuras complejas con ABS. Se disuelve en limoneno, dejando intacta la pieza de ABS.
PVA (alcohol polivinílico): El PVA es un filamento soluble en agua que se utiliza como material de soporte para imprimir estructuras complejas con PLA. Se disuelve en agua, dejando intacta la pieza de PLA.
ASA (acrilonitrilo estireno acrilato): Similar al ABS, el ASA tiene mejor resistencia a los rayos UV, por lo que es adecuado para aplicaciones en exteriores.
PEEK (poliéter éter cetona): El PEEK es un filamento de alto rendimiento con excelentes propiedades mecánicas y térmicas. Se utiliza en aplicaciones industriales exigentes.
Estos son sólo algunos ejemplos, y continuamente se desarrollan nuevos tipos de filamento para satisfacer necesidades específicas de la comunidad de impresión 3D. La elección del filamento depende de los requisitos específicos del objeto impreso, como la resistencia, la flexibilidad, la transparencia o la resistencia al calor.